El preso contestatario Miguel Cruz Navarro dio a conocer por vía telefónica desde la prisión provincial de Ariza provincia de Cienfuegos el incidente del preso Miguel Sánchez Álvarez, y el soborno del recluso Yosvani Cáceres Herrera
El pasado 12 de enero, aproximadamente a la 7 y 30 de la noche, el preso Miguel Sánchez, del destacamento siete, cubículo cinco, le cortó el rostro al jefe de grupo llamado Yoandris. La fuente aseguró que en el horario del recuento el guardia y su pelotón irrumpieron en el destacamento para humillarlo.
Días antes, Sánchez fue víctima de una descomunal golpiza propinada por el funcionario y su pelotón, luego le advirtieron que sería acusado de desacato.
El suceso, excitó al resto de los presos que defendían a Miguel, teniendo los funcionarios penitenciarios que cerrar las rejas del destacamento con candado para evitar que se produjera un motín.
El jefe de la delegación penitenciaria de la provincia, el coronel Alfredo, el jefe de la prisión Yoel y otros militares de mayor rango, persuadieron para que el recluso saliera del destacamento, prometiéndole, que no tendría problemas.
Los reclusos temen por la vida de Miguel, que fue trasladado para la Unidad de Instrucción, afirmaron que fue severamente golpeado. Sánchez Álvarez, denunciaba los abusos de los guardias contra los reclusos y la corrupción de los funcionarios y jefes.
Por otra parte el preso Yosvani Cáceres Herrera sancionado a 25 años de privación de libertad por el delito de asesinato, fue trasladado el pasado 11 de enero para el campamento. Llevaba 9 meses en prisión. Afirman varios presos que hubo corrupción.
El disgusto ha provocado comentarios, y descontento en la población penal, que llevan años dentro de la prisión con el mismo delito y delitos menos graves, a los que no les han dado la oportunidad de salir a un campamento. Sospechan que se trate de un acto de soborno, ya que el delito de asesinato es priorizado a nivel nacional, y por ser primario deber de cumplir como mínimo 10 años antes de ir a campamento.
Conocimiento del fraude, los jefes antes mencionados.
