En auditoria realizada por la Contraloría General de la República a la Empresa Municipal de Gastronomía de Holguín, se detectaron varias violaciones en su departamento económico, por lo que fue necesario la presencia de especialistas del Departamento Técnico de Investigaciones (DTI) del Ministerio del Interior, quienes detectaron una red de corrupción integrada principalmente por directivos y administrativos de dicha empresa.
Pero al pasar de los días, se le han sumado otros involucrados como: Sandro Mauricio Batista Hernández (director), Juan Carlos Aballe Torres (jefe de servicio), Gilberto Manuel Arévalo Útria (jefe de abastecimiento), y Abraham Aguilera Patterson (subdirector económico); este último designado como máximo responsable, al que se le ocuparon: 1.7 millones de pesos moneda nacional (CUP), artículos de uso personal y equipos electrodomésticos y dos motocicletas; en un registro que le realizaron en su vivienda, efectivos de la Policía Nacional Revolucionario (P.N.R).
Todas las personas antes mencionadas, además de los administrativos de las unidades de gastronomía El Coco y El Viajero, ubicadas en los Repartos “El Coco” y “San Rafael” respectivamente, en la ciudad de Holguín; están acusados por un delito de corrupción y se encuentran presos en la Unidad Provincial de Instrucción Penal conocida popularmente como “todo el mundo canta” sobrenombre ganado a raíz de los métodos de tortura psicológica y golpizas a los que son sometidos los detenidos en este lugar, por parte de los funcionarios del Ministerio del Interior que allí trabajan.
Los casos de corrupción en la ciudad de Holguín, se han incrementado de forma progresiva en los últimos tiempos y una muestra de ello, lo fue el período de agosto de 2014 a diciembre de 2015, en el que estuvieron involucrados en este tipo de delitos, funcionarios del Gobierno, miembros del Ministerio del Interior y directivos de empresas.
De esta fecha se recuerdan las acusaciones a Susel Reyes Tamayo (Presidenta del Poder Popular Provincial); Archy Felipe Lam Ayala (Vicepresidente para la Construcción del Poder Popular Provincial); Ángel Heredia Dorrego (Director de la Empresa Constructora de Obras del Poder Popular Provincial (ECOPP); Mayor Parra (Jefe de la Policía en el municipio Holguín); Mayor Vicente Acosta Ramírez (Jefe de Instrucción Penal en el municipio Holguín); Primer Teniente Camalier Batista (Jefe de Sector del Reparto Piedra Blanca); Franklin Arcaya Silva (Director de la Empresa Provincial de Conservación, Rehabilitación y Servicio de la Vivienda en la provincia Holguín); Yoandra Rojas Leyva (Directora del Centro Provincial de la Música y los Espectáculos de Holguín); y Juan José Rojas Ramírez (representante del grupo musical “Alerta Roja”) que se suicidó en la mañana del 25 de diciembre de 2015, para no ir a prisión.
Es oportuno señalar que en Cuba -en la mayoría de los casos- el único requisito que se tiene en cuenta para ocupar un cargo de dirección o de responsabilidad a cualquier nivel es militar en las filas del Partido Comunista de Cuba, en la Unión de Jóvenes Comunistas, o haber demostrado ser fiel al sistema. Se ignoran los conocimientos y las cualidades del individuo.
Esta política de cuadros, acompañada de otros desaciertos parecidos, ha provocado el colapso de la economía, y ha condenado al pueblo de Cuba a vivir por más de 57 años en la pobreza y en la inseguridad, dejándole como única alternativa para sobrevivir –sin tener que salir del país- la corrupción, que se ha convertido en parte necesaria e imprescindible de la existencia del cubano promedio de hoy en día, haciéndose cada vez más presente en nuestra sociedad.
Holguín, 12 de mayo de 2016.