Una fuente que pidió no se mencionara su nombre por medida de seguridad, dijo a esta reportera que el pasado 1 de diciembre, el preso Néstor Díaz Varona, de 47 años de edad, fue violado brutalmente por un preso, en la prisión Kilo 9, más conocida por la Disciplinaria, en la provincia Camagüey.
Néstor Díaz, quien es homosexual, fue violado por un preso que le propinó varios golpes en la cabeza para doblegarlo. La víctima, ensangrentada, comenzó a gritar para que lo auxiliaran, pero el carcelero de guardia le dijo que se estuviera tranquilo que él no iba asacar a nadie. El preso, desesperado, continuó gritando hasta que lo sacaron.
Ya afuera, Néstor le comunicó al carcelero que lo habían violado, y pidió que le hicieran los exámenes para hacer la denuncia por violación.
El segundo jefe de la prisión Camejo, quien estaba de guardia, envió al preso Varona al puesto médico para que la enfermera hiciera un simulacro para que se estuviera tranquilo, y que todo quedara ahí.
El carcelero Camejo, horas más tarde trasladó al violador a una celda de castigo e introdujo a Néstor para que el violador lo amenazara y este no lo acusara.
Díaz Varona, posteriormente fue enviado para el destacamento de los trabajadores. Antes fue amenazado por el propio segundo jefe de la prisión Camejo, quien le advirtió que si hablaba o acusaba a alguien, le quitaría todos los beneficios penales.
El 5 del presente mes, Néstor fue visitado en el destacamento por un carcelero enviado por Camejo quien le preguntó si todavía continuaba con la idea de acusar. El preso le contesto que si, por lo que fue llevado a una celda de castigo. En el camino, el carcelero le propinó varios golpes con la tonfa, dejándolo con hematomas y laceraciones en todo el cuerpo.
El preso Néstor Díaz, tiene una sanción de 12 años de privación de libertad por robo con violencia. Reside en la Carretera Central Este número 18 apartamento tres, entre Cuba y Vía Blanca, reparto Vista Hermosa, en la misma provincia. Su familia son dos hermanas enfermas, una con gota y la otra inválida, por lo que no pueden hacer nada por él.