Un verano demasiado caluroso está ocurriendo en Manzanillo, provincia Granma y un pueblo que lo está pasando sin posibilidad de diversión, por la falta de opciones, bien sea de locales, ofertas gastronómicas o por la precaria economía de sus moradores, que prefieren quedarse en sus viviendas para poder comprar lo mínimo y necesario del sustento familiar- Los niños culminaron su período escolar, después de haber compartido todas estas limitaciones junto a sus familias.
Las lluvias locales constantes que ha habido en Manzanillo, junto con la falta de alcantarillados públicos, provoca que algunas calles se inunden de agua como: Loynaz, Quintín Banderas, Plácido y otras más; esto motiva a niños y jóvenes a bañarse bajo la lluvia y a utilizarlas como improvisadas piscinas naturales, desconocedores o ignorantes del peligro que pueden significar estas aguas contaminadas.
Otros prefieren caminar por el Malecón del pueblo, donde existe una escultura del popular cantante, desaparecido físicamente, Benny More el cual le cantó a la otrora bella bahía dre Manzanillo.
También tras su desilusionante deambular llegan a lo que se conoce como la playita Manzanillera, una zona que hace muchos años fue dragada; pero en la actualidad dado a que allí desembocan las aguas albañales no se permite bañarse; pero de forma contradictoria, se ha erigido el centro de actividades manzanilleras, lo que provoca que adultos jóvenes y niños se bañen en sus infectadas aguas e incluso lo hagan con sus mascotas.
Ello ocurre sin que existan señales, ni mucho menos funcionarios, que impidan tan mortífera diversión, por último para hacer la situación más difícil, prima la venta de bebidas alcohólicas y cigarros y la oferta de confituras y golosinas es bastante escasa; casi todo en moneda convertible (cuc), por lo que la población escéptica recibió este verano como algo decepcionante y desilusionador.