Continúan los vecinos residentes en calle 110 número 19307 entre calzada de San Miguel y 199, reparto Residencial San Miguel, Ezequiel Salomón Hernández, alias Puli, Daimara Salomón Ruiz, hija, y esposa Eva Ruiz Pérez, hostigándoa mi familia y a mi.
El pasado 29 de agosto, me personé con mi hija Zuzy Sarais Viera García, en la 11na Unidad de la Policía del municipio de San Miguel del Padrón, ante el 1er teniente Ponciano por la supuesta denuncia de amenaza.
Cuando llegamos allí, el oficial nos condujo a una oficina para tomarle declaraciones a mi hija con respecto a lo planteado por la denunciante.
Según la denunciante nombrada Daimara, la hija de Puli, un cuatrero que es protegido por determinados policías, DTI y policía política. Que mi hija iba a cortarle el rostro.
El 25 de agosto, día de los hechos, mi hija y nieto se encontraban paseando con mis hermanas y sobrinos.
La fecha de la denuncia formulada por la hija de los habilidosos vecinos, fue el pasado 27 de agosto.
Mi hija regresó a la casa el 26 de agosto, hasta la fecha de esta información no ha visto a la denunciante.
Según la farsante, ella escuchó desde su casa que mi hija me decía que le iba a cortar el rostro y la iba a matar.
Acusación que se probó por la policía, que la denunciante había mentido.
Esto no terminó aquí. Los vecinos al ver que mi hija no fue detenida comenzaron a provocarla.
Mi hija y yo no reaccionamos a las provocaciones. Esto los molestó. Al rato instalaron un equipo de música.
Lo que divide la vivienda de los vecinos y la mía es un muro. Espacio de un metro.
En la mañana del 30 de agosto, el escándalo de la música y de ellos se sentía en mi casa.
El conflicto duró hasta las 7 de la noche del mismo día.
En más de 10 ocasiones efectúe llamadas al número de la PNR 106, por indisciplina social, dos quejas presentadas al superior de esta entidad y una a la jefa de guardia.
Se presentaron en dos ocasiones la patrulla 272 y en dos ocasiones más la patrulla 471, esta última se presentó con un policía que tenía el grado de mayor. Los patrulleros ordenaban a los vecinos apagar la música. Cuando se retiraban los agentes del orden público, los vecinos volvían a encender el equipo de música.
En la última ocasión se presentaron los dos carros patrulleros antes mencionados.
La señora de la vivienda Eva Ruiz, y su hija Daimara bajo los efectos del alcohol, delante de los policías presentes me gritaron y ofendieron, dijeron que me tenían grabada todas las conversaciones que tenia con la contrarrevolución que se reunía en mi casa, que ellos estaban protegidos por muchas gentes y que tenían el poder para destruirme a mi hija, y a mí.
Los carros patrulleros se retiraron dejándolas en el escándalo sin cumplir las órdenes establecidas en estos casos. Tuvieron que intervenir y tranquilizar a las provocadoras el CDR, FMC y vecinos. Esta reportera y mi hija las dejamos gritando y nos encerramos en la casa.
El lunes 1ro de septiembre, los poseídos abrieron el garaje y comenzaron a soldar.
Esta vez me quemaron el refrigerador. Tuve que nuevamente dirigirme a la 11na unidad y realizar la denuncia por daños de los equipos anteriores y este ultimo. Numero de denuncia 47708/2014.
En la noche de ese día un grupo de la guardia operativa se dirigió a mi casa para tomarme las declaraciones y solicitar la propiedad de cada uno de los equipos electrodomésticos dañados, olla arrocera, cocina eléctrica y refrigerador.
Luego que los policías se llegaran a la vivienda con quien mantengo el litigio tuvieron que retirarse, los demandados no les abrieron el portón, se negaron a declarar. Al otro día Salomón confirmó a la policía que si tiene una planta generadora de soldar criolla, que todavía la posee y utiliza hasta la fecha.
Hasta el momento no se ha tomado medidas con los vecinos, a pesar de los varios incidentes y amenazas de ellos expresados ante la autoridad.
Responsabilizo a la Policía Nacional Revolucionaria de San Miguel del Padrón, la Policía Política, al Departamento Técnico Investigativo (DTI), y al Gobierno Cubano por lo que le suceda a partir de ahora a mi hija, nieto y a mí.
Estos vecinos no es la primera vez que cometen delito de perjurio. En el 2010 la señora Eva Ruiz, dijo a la policía que yo iba a asesinar a mi hija y nieto con una tijera. Con esta falsa declaración la Seguridad del Estado aprovechó para detenerme y acusarme por el delito de amenaza y ejercicio arbitrario del derecho, por lo que fui sancionada y llevada a prisión.
El padre de Eva Ruiz es depredador sexual, la hija no tiene vínculo con su padre, debido a que un día este hombre manoseó a una amiguita de la hija menor.