Desde la prisión del Combinado del Este, en la Habana, el preso político Elías Pérez Bocourt y un recluso que se identificó como Pedro Pablo, informaron de la golpiza propinada el pasado 22 de noviembre al preso Marcos Suárez Sanabria, de 43 años de edad, por el teniente Simón, que lo dejó con lesiones graves para toda su vida.
El día mencionado el carcelero Simón y varios otros guardias realizaron una requisa en el edificio dos, segundo norte, compañías 2207. Al preso mencionado la jefatura de la prisión le había autorizado por su enfermedad a vestirse de blanco, pero el carcelero le retiró todas las ropas blancas que poseía. Al reclamar el preso Suarez, lo esposaron y le le dieron golpes en todo el cuerpo.
El preso quedó tirado en el piso, inmovilizado, con dos fracturas en la cadera, pero el carcelero Simón y los que estaban con él, siguieron dándoles patadas para que se levantara, y al no obtener resultado, lo arrastraron hasta el piso de abajo, le pisaron en varias ocasiones la cabeza y siguieron dándoles golpes, dejándolo con hematomas y lesiones graves en todo el cuerpo.
Cuando se dieron cuenta que no podía caminar, inconsciente, lo condujeron al Hospital Nacional de Reclusos, HNR. Los médicos lo trasladaron para el Hospital Miguel Enriquez, más conocido por la Benéfica, en el municipio Diez de Octubre.
Los especialistas de dicho hospital no se responsabilizaron con el preso, porque las fracturas de la cadera llevaban operación. El interno fue devuelto a la prisión.
El día 23 varios presos realizaron llamadas a esta reportera, y dijeron que el preso no se encuentra ingresado en el HNR, que no saben en qué hospital se encuentra. Ya hay varios reos en huelga de hambre en protesta por lo ocurrido.
