Nada de lo que me suceda es casual: esto es una maniobra de la policía política
El pasado 3 de febrero de 2014, esta reportera solicitó el contrato de un abogado del bufete colectivo de San Miguel del Padrón, situado en la calzada de Güines, para que represente por el supuesto delito de amenaza, por el que me denunció un carpintero que me estafó.
El carpintero, al que le pagué por adelantado un trabajo que no terminó, el pasado 23 de diciembre 2013, formuló la denuncia 7207. El caso es seguido por el instructor Yorkis.
Por el delito que me imputan pueden condenarme a un año de privación de libertad o imponerme 300 cuotas de multa.
También hice en el bufete colectivo la solicitud del contrato del cobro del dinero estafado por el denunciante.
El abogado Eisner Noa Matos, quien me representa en los dos contratos, me comunicó que se ha presentado en más de 10 ocasiones en la oficina de instrucciones de la oncena unidad del municipio para la revisión del Expediente de Fase Preparatoria pero nunca se lo han facilitado. Aseguró que ha tenido que presentarse ante el jefe de instrucciones quien le ha manifestado que el expediente está en “proceso de diligencia”.
El pasado 2 de mayo esta reportera se presentó en el bufete colectivo, para informarme de la situación del proceso, ya que han pasado más de 4 meses y no ha acaecido nada. El abogado me dijo que la pasada semana el expediente había sido enviado al tribunal, pero que la presidenta lo devolvió a la fiscalía por falta de documentación.
Esto es una maniobra de la policía política. Nada de lo que me suceda es casual. Han utilizado a un estafador para que me acuse. ¿De qué violencia habla este hombre? Amenazas y golpes fue lo que sufrimos mi hija, Yaquelin Boni y yo, el pasado 12 de abril, por parte de la policía y el funcionario municipal del PCC de apellido Pino, quien fue el principal agresor. Hay ensañamiento por parte de la presidenta del Poder Popular Ana María, el Secretario del PCC, el jefe de la 11na unidad, el coronel Visoso, conjuntamente con la fiscal Esmilda Olivares Suárez, para encausarme y llevarme a prisión por un delito que no cometí.
Es el mismo teatro que hace cuatro años cuando me encarcelaron, pero con diferentes actores. Solo les diré a los protagonistas de este teatro que no pagaré ninguna multa. Quienes tienen que ser procesados y sancionados son los que nos agredieron el 12 de abril.