El pasado 21 de junio dos presos intentaron fugarse, informo el preso Daniel Pérez Díaz, desde la prisión del Combinado del Este, situada en La Habana.
A las 9 de la noche de la fecha mencionada, dos presos del piso cuarto sur del edificio uno intentaron evadirse, uno de apellido Núñez Barreto, alias Pepe, y el otro nombrado William.
Los dos presos aprovecharon la hora de la repartición de los medicamentos, e intentaron bajar por el ascensor que distribuye la comida desde el cuarto piso. Los presos se agarraron de un cable de corriente que estaba pelado. Al tocar la corriente cayeron hasta la planta baja.
Aseguró la fuente que a William se le fracturó la clavícula, se lesionó los pies y la cabeza. Pepe se hirió en un muslo. A este último lo tienen en el área 47.
A pesar de las lesiones provocadas por la caída, los guardias le propinaron golpizas dejándolos sin conocimiento.
Al preso Daniel Pérez Díaz, le niegan los beneficios del teléfono, para que no denuncie la corrupción entre presos, militares y funcionarios. También le es negado, la libertad extrapenal por antipatía personal del jefe de medicina interna del Hospital Nacional de Reclusos de la prisión y otros médicos, la dieta que tienen suministrarle no se la facilitan.
Este preso quien es caso critico clínico por las patologías que presenta, se encuentra en el puesto médico del edificio uno de la prisión, sin condiciones para su salud. La medida fue tomada por el jefe médico para que dejara de denunciar la corrupción entre los médicos, enfermeras y militares con los cuellos blanco que están ingresados bajo prescripción fraudulenta.
El preso es provocado por los funcionarios para provocarle un infarto cardíaco, y así salir de él.
El enfermero Yoel, todos los días, lo provoca y amenaza con golpearlo.
