Rosa Hidalgo Aguilera, residente en calle 13 número 156 entre 28 y 30, Pueblo Nuevo, provincia Holguín, tiene a su hijo Rodolfo Rubén Perdomo Hidalgo, de 16 años, quien padece de trastornos mentales sicóticos con tendencias agresivas, recluido en la prisión provincial de Holguín, en la compañía 22 de menores, por el delito de robo con violencia.
A los 14 años Rodolfo Rubén fue recluido en el centro penitenciario de menores de la provincia por el delito de lesiones. A pesar de que el lesionado no lo acusó, conciente de que fue él quien provocó el problema, fue enviado al centro penitenciario de menores. Estando allí fue acosado sexualmente por una reeducadora de 22 años, llamada Yaneisis, con la que finalmente mantuvo relaciones sexuales a cambio de cigarros. La reeducadora fue acusada por la madre del menor, quien aseguró que ella lo coaccionaba para que se mantuviera callado. La reeducadora fue sancionada por el delito de corrupción de menores por el tribunal militar de la provincia, por lo que está cumpliendo 18 años de privación de libertad en la prisión provincial de mujeres.
Desde ese instante, Rubén ha sido objeto de represalias por parte de los funcionarios del MININT.
Una mañana en el centro de menores no le suministraron los medicamentos y lo llevaron a la delegación del MININT para obligarlo a que se retractara de la acusación hecha a la reeducadora. Allí fue coaccionado, le dijeron que si no decía todo lo que sabía de la reeducadora, no lo trasladarían para la prisión de menores en la provincia de Camagüey.
Los funcionarios le propinaron un golpiza. Para defenderse le mordió la mano a un teniente coronel. Este lo envió para Camagüey, sin que su madre supiera lo sucedido.
En el centro de menores, ubicado en la Carretera de Santa Cruz, permaneció 7 meses.
La madre se dirigió a la fiscalía, a la delegación provincial de la Dirección de Cárceles y Prisiones, hasta que logró que aceptaran que el menor fue abusado sexualmente por la reeducadora.
El juicio se realizó sin la participación del muchacho y la madre.
Al menor lo liberaron. Los funcionarios del MININT le prometieron a la madre que Rodolfo Rubén iba a tener tratamiento por siquiatría, pero no cumplieron con lo prometido.
El menor, ya en la calle, fue un día a Pueblo Nuevo y le quitó la bicicleta a otro muchacho, por lo que lo detuvieron, lo llevaron para instrucción penal, y luego lo trasladaron para la prisión provincial.
En la prisión, como represalia, no le suministran el tratamiento médico y no lo llevan al siquiatra. Le dicen a la madre que el especialista se encuentra en la Habana en un congreso.
El menor está muy agresivo últimamente, asegura su madre.
Los funcionarios y carceleros le pusieron a un reo de 19 años en la compañía, que está por asesinato, para que este abusara del menor. Se produjo una riña entre los dos jóvenes y el menor le pudo quitar el cuchillo que llevaba el otro, y lo apuñaló. Después que se recuperó, los carceleros lo volvieron a trasladar para la compañía de Perdomo. Este se autoagredió, ocasionándose en la yugular una herida que requirió 13 puntos de sutura. El preso aprovechó, fue con un cuchillo para apuñalear al menor y este pudo zafarse. Los carceleros no hicieron nada para parar la riña.
En estos momentos, el menor se encuentra en una celda de castigo que llamada “el chotolongo”, en condiciones infrahumanas.
Rosa Hidalgo Aguilera teme por la vida de su hijo, ha reclamado en todas las instancias del gobierno, pero no le hacen caso.