Las imágenes que muestran a un miembro del capítulo cubano de esta institución humanitaria agrediendo a un hombre detenido, luego de expresar públicamente, su desacuerdo con el gobierno en la Plaza Antonio Maceo de Santiago de Cuba, durante la misa que oficiaba su santidad Benedicto XVI. Son acciones despreciables.
La Cruz Roja es un movimiento mundial de características humanitarias, cuya misión es socorrer y soportar. Esta honrosa tarea no puede aparecer asociada con las agresiones físicas o cualquier otra acción restrictiva. Sus símbolos no deben ser utilizados para enmascarar a agentes que participan en acciones de contención ajenas al espíritu y vocación de esa institución.
El Observatorio Cubano de Derechos Humanos solicita del Comité Internacional de la Cruz Roja, que inicie un proceso de investigación sobre este suceso y que exija al gobierno y a la Cruz Roja cubana las responsabilidades que se derivan de esta repudiable agresión.