Dania Virgen García
Desde que el dictador Raúl Castro autorizó la compra- venta de casas, la corrupción ha tomado más fuerza en la Dirección de Vivienda. En el país se han acrecentado los desalojos y la desesperación de los desposeídos.
Se conoce de casos de personas que han sido desalojadas de viviendas donde han permanecido por más de dos años, debido a esto se ha incrementado la desesperación en los desposeídos. Daimela de la Caridad Pérez García es uno de esos casos.
Daimela de la Caridad, de 30 años, tiene tres niños: Melissa, de 10 años, Sheila de 6, quien padece trastornos respiratorios, y Rigoberto de cuatro años, quien es débil visual de nacimiento, y no ha podido ingresar en una escuela especial para niños con esos padecimientos porque su madre no tiene 30 cuc con qué sobornar a la directora.
Una noche, Daimela de la Caridad se introdujo en la vivienda situada en calle 3ra número 103, entre 2da y 4ta, Santa Fe, municipio Guanabacoa. La casa se encontraba vacía, porque los dueños emigraron hacia los Estados Unidos. Los vecinos, al verla sola, con sus tres niños, acudieron en su auxilio. La vivienda, que llevaba varios años cerrada, estaba en mal estado y no tenía agua ni electricidad.
Luego de dos años residiendo en dicha vivienda, en la mañana del 5 de julio fue desalojada. Participaron en el desalojo funcionarios de la Dirección de Vivienda y el PCC, una ambulancia y alrededor de 40 policías. Le advirtieron que sería llevada a prisión si no abandonaba la vivienda.
Otro caso de desalojo. Otra madre con sus hijos en la calle y otra vivienda para los corruptos.
En la tarde del mismo día del desalojo, la madre de Daimela, tuvo que salir en busca de su hija, que había desaparecido con sus tres niños: Luego supo que estaba deambulando por las calles, en busca de otra vivienda vacía para poder introducirse. Hasta que la descubran y la vuelvan a desalojar.