A las 11 de la mañana del 20 de enero, me presenté en el Tribunal Provincial de La Habana, en la Sala de la Seguridad del Estado, con el fin de entregar un escrito solicitando mi revocación, por la penosa situación a la que me tiene sometida la Seguridad del Estado, junto con los miembros de la Red Cubana de Comunicadores Comunitarios en todo el país, que suman 127.
La persona que me recibió el documento con el número de registro 108, me explicó que la Presidenta de la Sala -a la que iba dirigido- estaba en un juicio fuera del Tribunal y no regresaría hasta el día siguiente.
Cuando puse el primer pie fuera de la calle en que se encuentra ubicado el Tribunal, muy céntrica por estar frente al Capitolio Nacional, una mujer policía me dijo: “Martha tiene que acompañarnos”, enseguida apareció el oficial de la Seguridad del Estado conocido como Christian, al que le pregunté qué pasaría con Arnaldo Ramos Lauzurique (75) que estaba conmigo y me dijo que también estaba arrestado.
Nos condujeron en un auto patrulla de la Policía Nacional Revolucionaria (PNR) hasta la Estación de Policía de Zanja y registraron en un libro todo lo que tenía en la cartera. El Oficial de Guardia de la Carpeta dijo que allí no me podía quedar y esperando una decisión me tuvieron, sentada en el lobby, escoltada por tres mujeres policías, desde las 11 y media de la mañana hasta las 2 y media de la tarde.
Finalmente, me introdujeron en una oficina y apareció un oficial conocido como Mario, que según plantea tiene grado de coronel, que después de hablar durante 10 minutos cosas ofensivas, como acostumbran, me dijo que la respuesta a la carta era que los vecinos iban a seguir siendo hostiles conmigo y me podían volver a pegar en cualquier momento; que seguirían sin dejar permitir que alguien visitara mi vivienda y que no iban a acceder a que permutara. Después me informó que me trasladarían a mi casa.
Cuando llegamos al edificio donde vivo, estaba tomado por la Seguridad del Estado y después pude conocer que todos los miembros de la Red que trataron de ir a mi casa fueron arrestados, en total 16 y algunos dos veces. Sus nombres son: Bárbara Fernández Barrera, Misael Aguilar Hernández, Juan Carlos Díaz Fonseca, Judith Muñiz Peraza, José Antonio Sieres Ramallo (2), Juliet Michelena Díaz, Billy Joe Landa Linares, Danaisi Muñoz López, Yulexis Despaigne Pérez, Miladys Carnel González (2), Maritza Concepción Sarmientos y Laudelina Alcalde.
Los apresados fueron conducidos en autos patrullas a lugares distantes de sus casas, tales como: la playa de Guanabo, la Autopista de Pinar del Río y Cojímar y no los liberaron hasta entrada la noche.
El edificio permaneció tomado por la policía política sin permitir entrar o salir alguien de mi casa.
Quedó demostrado que se viola la legislación, sin ningún respeto a lo que está establecido, ya que la respuesta no la dio el Tribunal, sino la Seguridad del Estado.
La Habana, 21 de enero de 2014.