Martes , 27 Junio 2017

Un basurero profundo

San José de las Lajas, es la capital de -la hace 5 años creada- provincia de Mayabeque. Tiene su “boulevard” en la Avenida 45 entre las calles 54 y 64, donde además puede encontrarse el servicio de wi fi y algunos comercios de los conocidos como “shoppings”,  que venden refrescos, cervezas, cigarros y comestibles.

Este “boulevard” es considerado por los lajeros un importante sitio de reunión al encontrarse situado muy céntrico, que lo hace formar parte importante del entorno para los habitantes de la localidad.

En este lugar público, además de pequeños árboles y bancos de hierro -que están siempre ocupados por la gente- puede advertirse adornando el entorno, un pozo que a primera vista, hace pensar para quien se acerca a su brocal de cemento que se trata de una imitación, pero no es así, bien pegado a él se comprende -de inmediato- que se encuentra ante la presencia de un pozo auténtico y de considerable profundidad, probablemente entre unos quince y diecinueve metros.

Para evitar algún accidente que pudiera ser provocado por la curiosidad de los niños o por adultos que se acercan demasiado al pozo, la boca está protegida por finas varillas de hierro.

Cuando los curiosos se asoman al brocal pueden observar las piedras que componen el interior de su rústica arquitectura. Aunque ha sido buena la idea de conservar este pozo en el área del “boulevard”, pues tiene una indudable intención estética, la práctica cotidiana y los hábitos de las personas que asisten a este sitio han demostrado lo contrario.

Aun cuando la boca del pozo esta enrejada, eso no impide que un elevado número de personas lo escoja para lanzar todo tipo de deshechos, ignorando que en el entorno hay varios cestos de metal para la basura. Esto hace que cuando uno se asoma desde el brocal y mira hacia su interior, puede observar    -sin esforzarse mucho en su escrutinio-  una cantidad desmesurada de basura en el fondo que no permite saber a ciencia cierta si el pozo tiene agua o no, aunque aquellos que han residido por más tiempo en el municipio, aseguran que si tiene agua.

En su interior pululan las ya populares jabas de nylon y las latas de refrescos de diversos tipos y colores; y con excelente fraternidad están las latas de cerveza de todas las marcas.

Lo que comenzó por ser un motivo de embellecimiento en el entorno del “boulevard”  lajero se ha convertido en un espontáneo e incontenible depósito de basura, con la característica de ser subterráneo y profundo, quizás el más hondo que se conozca en la provincia de Mayabeque.

Mayabeque, 24 de mayo de 2016


 

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