Después de haber saqueado la casa del opositor Jorge Luis García Pérez “Antúnez” el pasado miércoles 5 de febrero, el régimen no le da tregua. Desde el día 7 tiene bloqueada la entrada a su vivienda por las dos calles de acceso, con vallas de la Policía Nacional Revolucionaria (PNR) que dicen “NO PASE”, pero la advertencia la llevan a cabo impidiendo el paso, incluyendo a familiares.
Varios reportes de disidentes de distintos lugares del país, dan a conocer que la policía política no les permitió llegar al lugar, como Fernando Vázquez Guerra, de la provincia de Camagüey que se presentó en horas de la madrugada y los que allí se encontraban –con los ojos bien abiertos- le dijeron que tenía que virar.
Peor suerte tuvo el matrimonio formado por Leodanis Risco Herrera y Yaletsis Pérez Ferrer, de Campo Hatuey, municipio de Majagua, provincia de Ciego de Ávila, miembros de la Coalición Central Opositora, a los que no les permitieron pasar, pero iban en compañía de su niña de 10 años nombrada Lidianis Risco Pérez, a la que la policía maltrató físicamente cuando junto con su papá trataba de llegar a casa de Antúnez. Por su parte la madre de la niña Yaletsis, fue arrestada, esposada y permaneció por más de tres horas dentro de un auto patrulla, cerrado bajo el sol.
La hermana de la esposa de Antúnez, también opositora Iris Tamara Pérez Aguilera, nombrada Ileana Susana, trató de llegar a la casa del matrimonio y se lo impidió por primera vez el oficial Misael de la Seguridad del Estado, con posterioridad hizo un segundo intento y se desconoce su paradero.
Las personas que están dentro de la casa, incluyendo la niña, no tienen alimentos para sostenerse, por lo que Iris se vio obligada a solicitar a un vecino le diera algo de comer para la muchachita.
Jorge Luis García Pérez “Antúnez” que dice estar en un estado de indefensión total, pide que se presione al régimen para que le devuelvan lo que le han robado de su casa, donde se cometieron varias violaciones de la Ley. Sus vecinos están siendo también hostigados, para poder pasar tienen que pedir permiso, enseñar el carné de identidad. Él quisiera que organizaciones, religiosos o personas que no tengan nada que ver con el régimen se personen para que puedan comprobar la situación por la que está pasando. Todo parece indicar –según explicó- que quieren que mueran de hambre las 5 personas que están dentro de su casa.
Además de la afectación por el robo perpetrado, ahora tiene que soportar el aislamiento, no hay dudas que es una pelea entre león y mono amarrado.