Al parecer los laboratorios Roberto Escudero no cuentan con un departamento encargado de comprobar la calidad y cantidad del producto final que elaboran. Muchas personas que por motivos de alguna enfermedad se ven obligados a hacer uso de ciertos medicamentos, sobre todo de aquellos que son de uso externo, se quejan por lo vacío que vienen los tubos de algunas pomadas.
Uno de ellos es el tolnaftato al 1%, antimicótico utilizado en enfermedades por contagio micótico, cuyos tubos son traídos a las farmacias con menos de la cantidad de gramos establecida e indicada en el envase, que debe ser 25 gramos.
Esto ha venido sucediendo en las farmacias del municipio de San Antonio de los Baños, perteneciente a la provincia de Artemisa, por lo que las personas que adquieren este producto, que de hecho tiene bastante demanda dentro de la población, no pueden menos que sentirse estafados, ya que no están comprando el medicamento con la cantidad establecida.
También pone a quienes lo necesitan en una difícil situación, pues al venir los tubos medios vacíos, los obliga a tener que recurrir con más rapidez a buscar otro. En ocasiones las mismas farmacéuticas han contestado en algún caso, cuando le han comentado al respecto, que ese problema lo tienen también todos los medicamentos que vienen en tubos y que provienen del laboratorio Roberto Escudero.
Todo apunta a que no hay un control de la calidad en la producción terminada de estos laboratorios, y como suele suceder, siempre el afectado es el pueblo.
Artemisa, 18 de julio de 2015.