En la más reciente asamblea del Parlamento cubano, realizada en los días finales del mes de diciembre, se debatieron disímiles temas, entre ellos los resultados económicos del 2013.
Muchos fueron los temas analizados y también muchas las justificaciones ante los incumplimientos. También elogiaron los “logros” del año pasado, la mayoría asociados al trabajo por cuenta propia, pues ya son mas de 400 mil los asociados a este tipo de labor.
Sin embrago, en ninguno de los casos, los diputados, cual si todos fueran marcianos, se refirieron a la verdad que vive el pueblo cubano. Nunca se habló de qué come el pueblo, ni de qué forma logran subsistir los casi 11 millones de cubanos que “viven” de su salario.
Dos o tres días después de finalizada la asamblea, los principales medios del país, como el Noticiero Nacional de Televisión, hacían alarde del gran milagro, del gran logro, de gran resultado que fue la inauguración de nuevos “mercaditos” que recibían los productos directamente de los productores, de los mismos que hablaban en la asamblea.
Ante mis ojos y los de millones de cubanos pasaron las imágenes “perfectas” de mercados en las provincias de Mayabeque, Artemisa y La Habana con mucha variedad de hortalizas y vegetales, pero sin decir los precios de ellos. La apertura de estos mercados es uno de los “resultados” mas “importantes” del gobierno de Raúl Castro, en el intento de hacer ver al mundo que Cuba cambia y se abre a otras formas de producción y mercado.
Según los reportes de prensa la gente humilde estaba “muy contenta” con esta nueva medida…”los productos tiene buena calidad y todo esta muy bien”, se atrevían a decir algunos entrevistados, sin embargo nadie se refería a los precios. ¿por qué nadie decía que los precios eran asequibles o estaban por encima de lo que puede adquirir el ciudadano común con su salario? .
Al día siguiente los comentarios al respecto pululaban y más cuando llegaban los días finales del año, sin que la gente de a pié supiera cómo se las arreglaría para celebrar el advenimiento del 2014.
“El gobierno les da las tierras gratis y los agricultores se enriquecen a costa el pueblo,…no acabo de entender porqué la gente no dice frente a las cámaras lo que dice por detrás, yo quisiera que un día me entrevistaran a mi, que lo que voy a poner es mucho”…, decía una señora de unos 70 años de edad que compraba unas malangas a 5 pesos la libra. “Mire usted, esto es un robo, pagar 10 pesos por cuatro malangas, cuando mi pensión es de 200 pesos solamente (unos 10 CUC, equivalente a unos 8 USD), alguien tiene que ponerle limites a esto y ese alguien debe ser el gobierno”, añade.
“Señora no sea ilusa, usted podrá decir lo que quiera, que ellos, los periodistas esos que le hacen el juego al gobierno, no lo ponen, eso lo editan, lo censuran, porque sino a ellos también los desaparecen, los periodistas también hacen su trabajo, y tiene que vivir, ellos dicen lo que el partido les orienta, hacen ver que hay apertura y es mentira, todo es una gran mentira”, se lo digo yo que trabajo en los medios”, le riposta una mujer relativamente joven que compraba tomates.
“Mire, agrega, usted sabe lo que es en esta época del año y que el tomate no baje de 7 pesos la libra, y de mala calidad, porque los mejorcitos están a 10 pesos, cuándo se ha visto esto?, y dicen que vamos mejorando, no sé, será para ellos, que cada día están mas gordos, al Murillo ese (vicepresidente encargado de las transformaciones en Cuba), ahorita se le saltan los botones de la camisa de lo gordo que está” añade la joven.
“Por el modo con que tranquilamente dicen que no se pueden aumentar los salarios, uno puede darse cuenta de que ellos no tienen ni la mínima idea de la verdad que vive este pueblo… mire, yo siempre digo que una cosa es ver a la gente muriéndose de hambre y otra es morirse uno mismo, le puedo asegurar que la perspectiva cambia totalmente, por eso Ho Chi Ming vivía en una casa de campaña en el patio de la Casa Presidencial, para no olvidase de como vivían las grandes mayorías”, significa esta persona que al parecer no habla por hablar.
“Yo no comprendo nada, ¿esas personas que están en el Parlamento no viven en Cuba?… porque mire, muchos de ellos viven muy bien y no saben nada de nada de las grandes masas, pero otra cantidad sí vive igual que nosotros y esos se quedan callados”, comenta un joven que escuchaba mientras escogía unas guayabas a 4 pesos la libra. Otro joven de unos 25 años que le acompañaba, ripostó “lo que pasa es que esos que son como nosotros los eligen para decir que hay democracia y para que levanten las manos como si fueran robots para aprobar todo lo deciden los que mandan de verdad en este país, porque sino lo hacen, los desaparecen, la verdad para mi son dignos de lastima, ir a hacerle el juego a los que viven bien, si la situación no fuera tan patética daría mucha gracia”.
“Han dejado el pueblo a la deriva…arréglenselas como puedan, casi es lo que nos han querido decir, esto se me parece mas al neoliberalismo que al socialismo, el gobierno se ha desentendido por completo de los precios y de las necesidades de la población, dice que es la ley de oferta y demanda, yo no estoy en desacuerdo, lo que pasa es que los productores quieren hacerse ricos aumentando los precios, no produciendo mas, como debe ser, como es en el mundo entero, y el estado no hace nada, la verdad es que no les importa”, agrega la anciana.
“Estoy de acuerdo con usted, afirma la joven de los tomates, yo hace algún tiempo me pregunto ¿esto es socialismo o neoliberalismo? , y mire que en este país se ha hablado mal del neoliberalismo…, pero ellos están haciendo lo mismo. En mi opinión en Cuba ha surgido un nuevo concepto que los economistas deben tener en cuenta y es Socialismo Neoliberal, dice triunfalmente mientras deja a todos pensativos y ella se marcha sonriendo maliciosamente.