El señor Cesar Miguel Amador Oña, fue sentenciado el 16 de julio de 2009, por convicción del Tribunal, por el delito de tráfico de personas; con una sanción de 10 años de privación de libertad. Se encuentra cumpliendo en la prisión de Agayán, Encrucijada, Villa Clara.
Desde el mes de Octubre le corresponde la libertad condicional y los documentos que se deben de tramitar aún no los han llevado hacia el penal.
Los oficiales a cargo le han dicho que como es residente americano, debe de renovar su residencia ya que sin ella no le dan la libertad.
Esto es toda una contradicción, ya que para poder obtener un documento de “Returning Residence” en la Oficina de Intereses de los Estados Unidos de América en La Habana, debe presentarse personalmente y someterse a una entrevista. Es una de las formas de falacia que emplea el régimen para mantener entretenidos los reos.
Villa Clara, 1ro. de marzo de 2014.