Es habitual en los barrios de cualquier lugar del país, encontrar salideros tanto de aguas, potables como albañales, y formando parte del entorno, los micro vertederos. La Empresa de Comunales del Poder Popular de cada localidad y la de Acueductos, (donde esté creada), tienen a su cargo a nivel nacional la solución de estos problemas. En particular en la capital de la isla también funciona la empresa de Aguas Negras.
Si usted visita la ciudad de Guantánamo, municipio cabecera de la provincia de ese mismo nombre, a pesar de ser la última del país de occidente a oriente, no se escapa de todos estos problemas que tanto molestan a la población.
Podríamos tomar como ejemplo la calle Santa Rita entre 17 y 18 Norte en el Reparto Caribe, allí los vecinos le dirán que todo quedó en el olvido.
Hace seis meses atrás, en esta calle estaba ubicado un pequeño contenedor plástico, para depositar los desechos sólidos de un área que abarca un promedio de ocho edificios multifamiliares -y como era evidente- su capacidad no se correspondía con el volumen de basura que se vertía en él, razón por la cual los alrededores se inundaban e incluso a menudo los vecinos de esa circunscripción y hasta los médicos, se quejaban por la fetidez existente y el aumento de vectores en los condominios aledaños.
Lo que nadie se imaginó fue que lejos de darle solución al problema, lo que se hizo fue crear otro peor, debido a que retiraron aquel pequeño contenedor y el área se convirtió en un micro vertedero.
Los medios de difusión masiva de la isla, realizan innumerables campañas en favor del cuidado del medio ambiente, que alientan a la población a la reducción de ruidos, no arrojar desechos al mar o a los ríos, no quemar basuras y entre otras medidas, impedir la creación de micro vertederos. Es por tanta propaganda que los ciudadanos se preguntan ¿cómo es posible que el régimen realice acciones encaminadas a evitar el deterioro del medio ambiente; y a su vez, se encargue de romper sus propias reglas?
Al visitar la localidad, una residente expresó: “todo esto demuestra lo farsante que puede llegar a ser este gobierno, mira que hemos reclamado que pongan un contenedor grande para esta zona y nada. Después ponen pancartas que indican que podemos ser multados por una suma de cinco mil pesos por arrojar desechos en los exteriores, pero bueno…, como dice el dicho: ¿quién dice que el macho (cerdo) puede hablar de higiene?”.
Los días continúan pasando y el asunto de los micro-vertederos en esta ciudad guantanamera se agrava. Lo irónico del caso, es que mientras en otras partes del mundo, las noticias hablan de las ciudades que se inundan por las continuas lluvias o por penetraciones del mar, Guantánamo se inunda también, pero de basura.
Guantánamo, abril de 2016.
