La dirección del turismo en Cuba, que pretende que ese ramo sea la principal industria del país, se complace porque se ha ido acortando la distancia con República Dominicana como destino de visitantes en el Caribe insular, ya que en 2014 alcanzó algo más de tres millones, que fue un 75% de los que arribaron a ese país.
Al ritmo actual de crecimiento de turistas, en 2025 se recibiría una cantidad similar a la de Dominicana en 2014 (5,2 millones), pero para ello se tendría que materializar el incremento proyectado de habitaciones, unos 135 hoteles del tamaño de los actuales. Sin embargo la cartera puesta a disposición de inversionistas extranjeros no cubre esas expectativas, ya que solo contempla 33 contratos de administración y comercialización en instalaciones nuevas o en existencia, lo cual impondría un gran esfuerzo a la inestable gestión inversionista nacional.
Dar ese salto, que no significa necesariamente alcanzar el primer destino en el área, no es nada sencillo, ya que en la década anterior el incremento fue de solo 684 mil turistas para un 30% y en la próxima sería mucho mayor un 76%, pero si no se eleva la eficiencia no estará acompañado de un alza equivalente en los ingresos.
Los ingresos brutos por turista han descendido en los siete últimos años desde 1000 dólares en 2008, a 893 en 2014, que fue el más bajo en el período y si se mantiene ese indicador aunque no continúe deteriorándose, no va a existir una elevación de la eficiencia.
Lo más importante se refiere a los ingresos netos que solo representaron hasta el tercer trimestre de 2014 el 45% de los ingresos brutos y que de mantenerse solo llegarían a 2 628 millones en 2025, muy lejos del dinero fresco que aportan los servicios médicos y las remesas familiares.
Otro indicador que no ha dejado de deteriorarse es el de los días de estancia por visitante, que fue de 6,95 noches en 2008 y llegó a su nivel más bajo en 2014 con 6,49; lo cual significa, que descontando el costo de la habitación de unos 100 dólares diarios, cada turista gastaba adicionalmente en 2008 unos 44 dólares diarios y se redujo a 38 en 2014.
Se podrá argumentar que se espera el arribo en el futuro de vacacionistas de mayor calidad con la apertura de la emisión desde Estados Unidos, pero eso requeriría una ampliación en cantidad y variedad de las ofertas en el sector.
Superar o siquiera igualar a Santo Domingo no depende por tanto de factores lineales, sino de transformaciones profundas en esta rama que serán muy difíciles de lograr.
La Habana, 7 de julio de 2015.