El retraso económico que está sufriendo Cuba está afectando también al medio ambiente en nuestro país. La implantación de la energía renovable en Cuba tiene unas carencias gravísimas debido a los impedimentos que aplica el gobierno.
Tal y como informa REVE, Cuba cuenta con solo 7 MW de eólica, unas pocas instalaciones de energía solar fotovoltaica, y prácticamente ninguna instalación de paneles termodinámicos.
Aprovechar de manera racional la energía solar constituye uno de los mayores retos actuales de la humanidad, encaminados a salvar el planeta del deterioro medioambiental. De ahí la necesidad de aunar esfuerzos comunes a nivel global en pos de la utilización de esa energía natural.