Maritza Concepción Sarmiento.– El día 30 de enero -alrededor de las 6 de la tarde- Evelin Pineda Concepción, de 19 años de edad, se encontraba con fuertes dolores de estómago, fiebre y diarreas, por lo que la llevaron al policlínico Julio Antonio Mella, de Cruz Verde y Maceo, en Guanabacoa, La Habana; y el doctor que la atendió le puso un suero para hidratarla y la remitió en una ambulancia para el hospital Miguel Enríquez, antigua Benéfica (conocida popularmente en la actualidad como “La Maléfica”), para que allí la viera un especialista, ya que podría tener un embarazo ectópico.
En ese hospital le realizaron varios análisis y la sentaron en el salón de espera del Cuerpo de Guardia, con el suero puesto, aguardando los resultados, en lugar de acostarla en una camilla.
Posteriormente determinaron realizarle un enjuague de estómago, por lo que la enviaron al Salón de Traumatología. En ese lugar Evelin se aterrorizó al notar varias camillas rotas, llenas de sangre y orinadas. También el piso se encontraba en las mismas condiciones. Ella misma se retiró el suero y le dijo al médico que en esa situación no estaba dispuesta a someterse a ningún tratamiento con el riesgo de adquirir virus y bacterias.
Para poder determinar su estado físico, tuvo que acudir al Hospital Gineco-obstétrico conocido por “La Fátima”, donde le realizaron un ultrasonido y le diagnosticaron una inflamación pélvica aguda.
La Habana, 5 de febrero de 2013. Fundación Madres, Familia y Futuro, un proyecto de la Red Cubana de Comunicadores Comunitarios.
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