Decir que los materiales de construcción van a “entrar” no soluciona las necesidades de las personas. No son pocos aquellos que acuden una y otra vez, día tras día al rastro del municipio de San Antonio de los Baños, en busca de lo que necesitan para resolver problemas de reparación en sus hogares e incluso para fabricarlos.
Casi se hace una costumbre que cuando las personas se dirigen allí para averiguar sobre los materiales, que hace tiempo se les dijo que les asignarían, la respuesta vuelve a ser “no han entrado” y “están por llegar”.
En este pueblo de la provincia de Artemisa, existen casos de personas que llevan algunos años esperando por los materiales del rastro, los cuales les son asignados por la Dirección Municipal de la Vivienda y que deben después ir a buscarlos allí, pero físicamente no existen.
Eso es lo que está establecido en los llamados subsidios, cuyos módulos de materiales son los que más se tardan en aparecer; a pesar de ser los que mayor prioridad deberían tener, garantizándolos con rapidez y no dilatar tanto la posibilidad de adquirirlos, después de la autorización; al punto de tardarse años en llegar a las manos de la persona que los necesita.
No en pocas ocasiones estos módulos para subsidiados se quedan a la mitad del camino, sin que se sepa a donde fueron a parar, pues más de una vez se ha podido escuchar la noticia oficial, de que la Dirección Municipal de la Vivienda ha estado implicada en casos de corrupción, como sucedió recientemente, pero todo se soluciona cambiando el personal y quizás algunos son juzgados por los tribunales. Los perjudicados en todo esto son los que tienen que adquirir los medios para arreglar sus viviendas, a los que nunca se les da solución.
Artemisa, 22 de setiembre de 2015.
