Rodney Pérez González e Isis, forman parte de algunas de las familias que habitan en un antiguo comedor obrero, abandonado desde hace más de 15 años, luego del desmantelamiento de un central azucarero local conocido como “El Trapiche Rosario”, en calle 31 poblado Rubén Martínez Villena, municipio Madruga, provincia de Mayabeque.
Según el testimonio de otros moradores ilegales -llamados así por las autoridades locales- este sitio se encontraba como ruinas abandonadas, debido al deterioro en que quedaron sus estructuras constructivas, pero allí se han presentado en más de una ocasión para esgrimir amenazas, en contra de los que viven.
Con esfuerzo colectivo, tres familias integradas por 8 personas lograron rescatar un sitio perdido por el canibaleo de forasteros y locales. Hoy se encuentran amenazados de ser desalojados, porque el gobierno municipal ha puesto los ojos y su interés en el mencionado inmueble, que además de haber estado desatendido, tiene condiciones físicas deplorables.
Sin la garantía de algún sitio donde ir Rodney nos afirmó que solo saldrá de allí para una cárcel si es preciso y su esposa debe ser deportada para Holguín, ya que es su lugar de origen.
El suministro de electricidad es pagado por el Estado, para no dar derecho de titularidad a los moradores ilegales de un sitio desechado. Hoy el gobierno municipal siente el derecho de desalojar a quienes no tienen más que ese pedazo de tierra donde formar sus vidas.
Una de las familias, bajo tanta presión, se vio obligada o coaccionada, para que se entienda mejor, a abandonar la vivienda.
Estar en este lugar y ver las imágenes que muestran sus alrededores, corrobora que si estas familias de van de allí, con apenas un par de años después del desalojo, el sitio se vuelve nada. Pero así lo prefiere el gobierno, un área abandonada, pero suya.
Mayabeque, 14 de julio de 2015.