Con la escasez de transporte existente en todo el país, los pobladores de San Antonio de los Baños, hemos terminado por depender del ómnibus de Güira de Melena, municipio aledaño, también perteneciente a la provincia de Artemisa.
La terminal de ómnibus de nuestra localidad, hace varias semanas que no garantiza la guagua que hace el viaje hasta el municipio de Santiago de las Vegas, en la capital. El traslado hacia este punto es de gran importancia para los ariguanabenses, debido a la cantidad de personas que están incluso vinculadas laboralmente con La Habana y tienen allí familia.
Tras brindar de forma pública las más diversas justificaciones del por qué este transporte no sale, también responden de esta forma a los miembros de la población que llaman por teléfono a la terminal para averiguar acerca del mismo, la situación continúa en las mismas.
Por su parte los transportistas privados dan este servicio, pero no todas las personas pueden pagar diez pesos (moneda nacional) para hacer esta ruta en este tipo de vehículo, es por eso que para la mayoría de los ciudadanos es tan importante este transporte público y sobre todo que cuando existe funcione en sus horarios correspondientes.
Los pobladores de “La Villa del Humor”, han optado por esperar el ómnibus que viene de Güira de Melena y que pasa por San Antonio y continúa su viaje hasta Santiago de las Vegas, con un precio de dos pesos por este servicio.
Esta ruta resulta eficiente en sus viajes, si se tiene en cuenta que es bastante estable en los tres viajes que realiza al día, y el vehículo que utiliza es una guagua grande de color naranja, y que es bastante amplia, diferente a la de San Antonio que es un pequeño ómnibus Diana al estilo de las viejas guaguas Girón.
Si hay algo que tiene agobiados a los miembros de nuestra comunidad –al igual que al resto del país- es la ineficiencia del transporte, en este momento casi inexistente, por lo que sería justo que la Dirección de Transporte Municipal, encargada de dicho servicio pusiera seriedad en una solución, y que se acabaran las justificaciones.
Artemisa, 29 de diciembre de 2015.