Es particularmente importante la visita Sr. Barack Obama, presidente de los Estados Unidos de América a Cuba tanto por razones históricas como por razones políticas.
Desde el punto de vista político inaugura una nueva época en el marco del proceso de normalización de relaciones diplomáticas entre Cuba y Estados Unidos con nuevos paradigma de convivencia para una diversidad de sujetos culturales asumidos desde su propia identidad.
Por otra parte, desmonta la narrativa de “fortaleza sitiada” que el gobierno cubano ha estado alimentando en la arena internacional como en su particular agenda doméstica.
Su histórica visita abre la posibilidad de reconstruir las aduanas de intercambio entre la sociedad civil cubana en su total diversidad y la sociedad civil estadounidense a través de la diplomacia cultural ciudadana. Es más importante aún desde el punto de vista de la identidad cultural y la integración racial en Cuba. Obama simboliza ese momento en el que, pese a la existencia del racismo en los Estados Unidos, las tendencias modernizadoras e integradoras imponen la decencia en el campo de la política y envían el vigoroso mensaje de que definitivamente todos somos iguales. Es un símbolo cultural, más allá del significado inmediato, tanto político como histórico, que nos dice que los Otros pueden dejar de ser los exóticos subordinados,
todavía no es así en Cuba.
De modo que encierra un inmenso simbolismo que esta visita ocurra en el Día Internacional para la Eliminación de la Discriminación Racial (21 de Marzo). Para el Comité Ciudadanos por la Integración Racial (CIR), quien desde el activismo ciudadano viene colocando en la esfera pública la problemática racial cubana esto significa la posibilidad de revigorizar la lucha por la integración racial mostrando y demostrando que la pigmentación del color de la piel no constituye, por naturaleza, la negación del ascenso social, económico y político de hombres y mujeres preterido por la historia y la sociedad.
El CIR comprometido también con la Declaración y el Programa de Acción de Durban ve en la visita de Obama el necesario empoderamiento simbólico que ayudará a elevar la autoestima de la comunidad afrodescendiente cubana y de aquellos que, independientemente de sus orígenes étnicos o raciales, creen que la integración de las diversas identidades es el futuro en Cuba y en las Américas.
Comité Ciudadanos por la Integración Racial
La Habana, 21 de marzo de 2016