Los ministros de Exteriores de la Unión Europea encomendaron hoy a la jefa de diplomacia europea, Catherine Ashton, que inicie el proceso de negociación con Cuba para crear un nuevo acuerdo de cooperación entre los veintisiete y la Isla. De esta manera, la Unión Europea, desactiva la Posición Común hacia Cuba por ella misma aprobada en 1996, que condicionaba cualquier cambio en las relaciones con La Habana a una mejora en el respeto a las libertades y los derechos humanos.
Uno de los representantes del gobierno del Partido Popular, ha justificado este cambio de postura de la UE diciendo que “en los últimos años vemos una evolución positiva en la política de Cuba”.
La anterior afirmación no guarda sintonía alguna con la realidad cubana, donde los actos represivos y las detenciones han aumentado en los últimos años. Estas son las cifras del drama de las detenciones por motivos políticos: en el año 2010 se produjeron 2047, en el 2011 un total de 4123 y en lo que va del 2012 se han producido 5625 detenciones arbitrarias contra personas en el ejercicio de derechos universalmente reconocidos.
Mientras se efectuaba esta reunión permanecía detenido acusado de “resistencia” Antonio Enrique González-Rodiles, un joven intelectual cubano (físico y matemático) que coordina iniciativas cívicas como Estado de Sats y la Campaña “Por Otra Cuba” que solicita al Gobierno la ratificación de los pactos de Derechos Económicos Sociales y Culturales y Civiles y Políticos firmados en 2008.
Esta y no otra, es la realidad que agobia al pueblo, es la realidad que sufren los demócratas cubanos. Una realidad hoy falseada en Europa.
Con la actuación de hoy, Cuba dejará de ser el país de América Latina sin acuerdo contractual de cooperación con la UE, sin embargo, pasará a ocupar otro excepcional lugar: el país al que no se le exigen requisitos democráticos para beneficiarse de un acuerdo de ese tipo.
El Observatorio Cubano de Derechos humanos ratifica lo expresado en la carta enviada a Catherine Ashton, Alto Representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores con motivo de esta reunión, ya que entendemos que no existe justificación alguna para flexibilizar la Posición Común. No es la Posición Común, “muy restrictiva”, quien es restrictivo de las libertades es el gobierno cubano. Y es cuanto menos lamentable la colectivización una decisión inoportuna e impropia de países democráticos.
Observatorio Cubano de Derechos Humanos
Madrid 19/11/2012