En todo el país, para un total de casi 4 millones de tarjetas magnéticas, sólo existen en la actualidad, un poco más de 780 cajeros automáticos; por lo que las operaciones con esta tecnología se convierten a veces en una odisea.
Me cuenta esta historia, una vecina de la calle San Pedro, en el capitalino Cerro: “Vivo cerca del cajero automático que hace esquina con mi cuadra y la calzada de Ayestarán, le cobro la chequera a mi abuela que transferí a la tarjeta magnética, pero ese cajero casi nunca funciona. Como trabajo cerca de la Terminal de Ómnibus Nacionales pudiera utilizar el que está en la puerta del banco de allí, pero se pasa meses roto. Por lo que me tengo que desplazar hasta el Banco de los bajos del Ministerio de Transporte (MITRANS), en Boyeros y Tulipán; lo que implica caminar más de 15 cuadras; pero es que el otro cajero posible, está frente al Cuartel de Bomberos de la Calzada del Cerro y me queda mucho más lejos“.
En entrevista concedida al periódico Granma, el 27 de febrero, por directivos del Banco Nacional de Cuba, Jorge J. Sánchez Denis director general de REDSA (Red de Servicios de Seguridad Nueva Banca) y Orestes Perdomo Santana, director adjunto del Banco Central de Cuba, justificaron casi todas las deficiencias y problemas que tienen los cajeros automáticos, a saber: rotos, sucios y sin dinero sobre todo por estar sometidos a una sobreexplotación.
Aunque los dirigentes dijeron que el mantenimiento de los cajeros se efectúa desde las 2 hasta las 4 de la madrugada, hay Bancos que lo hacen en horario de servicio a la población, a pesar de las largas colas que se forman.
Otro problema es la doble circulación de la moneda que impide que los cajeros sean llenados con varias denominaciones, aunque se conocen cajeros a la puerta de Bancos que tienen billetes de 5 moneda nacional y hasta de a 1. Lo que resulta inconcebible para todos, es que si el salario promedio de un trabajador cubano
es de un poco más de 400 moneda nacional (unos 16.00 CUC) y las pensiones más antiguas, de un poco más de 200 pesos, no se entiende porqué estos equipos son llenados con billetes de a 50 y 100.
Por ejemplo, aquellos jubilados que reciben 242 moneda nacional, tienen que esperar varios meses para poder cobrar los picos que le van quedando de la pensión, ya que los cajeros la mayoría de las veces no tienen billetes de baja denominación para completar el total del importe a recibir. A esto no se le ha buscado una posible solución, como que en la semana del cobro se depositaran estos tipos de billetes.
Cuba es uno de los pocos países que tienen Casa de la Moneda por tanto el régimen no puede esgrimir el pretexto de no poseer billetes, pues se imprimen aquí igual que se hacen las monedas.
Sánchez Denis dijo que para este año se pretenden instalar unos 60 cajeros, de los cuales 45 se ubicarán en la capital. El problema se agrava en los barrios periféricos donde habitan miles de personas, como: Mulgoba, del municipio Boyeros que por no poseer cajeros sus habitantes tienen que transportarse hasta Santiago de las Vegas.
De acuerdo a las predicciones del avance tecnológico, en el futuro, puede ser dentro de dos o tres generaciones; en el mundo el dinero en papel tenderá a desaparecerá y toda transacción será electrónica; pero ahora la inmensa mayoría de los jubilados cubanos, prefieren cobrar a la antigua, con chequera en mano.
La Habana, 25 de marzo de 2017
