Una epidemia, de la que hasta el momento se desconoce la causa ni que es, causó la muerte a un menor de 11 años hace unos días; al principio pareció controlada por los médicos, quienes pensaban que era meningitis fulminante, pero análisis posteriores dieron negativo a esa enfermedad y lo cierto es que muchos adultos que tuvieron contacto con los niños enfermos se enfermaron también.
Desde hace meses el equipo de trabajo del Observatorio en Pinar del Río alertó al Gobierno y a la dirección provincial de salud para evitar brotes de epidemias como estas, dadas las condiciones higiénicas que presenta la provincia; la respuesta que plantea la dirección de salud es que no tiene apoyo de otras instituciones para dar solución al éste problema.
El activista Leodan Suarez Quiñones está hospitalizado y se encuentra en estos momentos en una sala bajo estudio y según informa, a cada segundo llegan más y más pacientes con la misma patología, muchos están bajo un mosquitero, otros en un cuarto donde está prohibida la entrada o salida de nadie excepto personal médico, varios están en terapia y cuidados intensivos, y con frecuencia se siente el llanto de los familiares pues siguen falleciendo más personas por estas causas desconocidas.
El Gobierno no informa por ninguna vía noticias sobre esta enfermedad, tampoco los médicos informan por temor a represalias.
