Estamos acostumbrados a que sucedan los accidentes en el país y no se divulguen por los medios, tiene que ser algo que ha corrido de boca en boca o que no implique a los vehículos oficiales, como en el reciente accidente de la Carretera de Santa Cruz, en la provincia de Camagüey, de un camión particular que dejó 13 fallecidos y varias personas en estado crítico, de los cuales se comunicó murieron dos más, algo que no es costumbre, porque a este tipo de noticias, igual que a otras, el régimen no le da continuación en las informaciones.
Es lamentable cuando se pierden vidas, pero también si ocurren daños materiales que para algunas personas resultan casi irreversibles. Ese fue el caso del ómnibus Diana, que cubre la ruta 19 del Reparto Modelo al Lenin en la provincia de Camagüey, que el pasado 28 de setiembre cuando transitaba por la calle Rosario sobre las 8 de la noche, perdió el control con el pavimento mojado y cuando trató de adelantar a un vehículo se impactó contra la fachada de una vivienda, que quedó destruida.
Por su parte el chofer tuvo que ser hospitalizado con heridas graves, aunque por fortuna no hubo que lamentar ningún fallecido.
Tanto la casa como el ómnibus, que tenía el número 1304, quedaron en estado inservible, en este lugar las viviendas están unidas unas con otras por paredes intermedias y en la mayoría son pequeños locales. Sin dudas los dueños del inmueble tienen más que perder que el Estado.
Cuentan los vecinos que minutos antes había entrado a la casa el abuelo con su nieta y que producto del calor, allí se acostumbra a sacar sillas por la noche y sentarse en la acera, o a estar parado en la puerta de la calle, por lo que consideran un milagro no haya sido más trágico el accidente.
Camagüey, 13 de octubre de 2015.