Luis Pedroso Domínguez estuvo ingresado en el hospital La Benéfica, y allí sufrió numerosos maltratos, que fueron dados a conocer por Cubanet, a través de esta comunicadora.
Él fue diagnosticado de Cirrosis Hepática, y le dieron alta médica. No se le practicó ningún otro estudio o análisis. Todas las personas que lo veían se percataban que estaba en pésimo estado de salud y sin medicación indicada para su casa. Solo unos días después de haber dejado el hospital falleció en la calle.
La hija de Pedroso, Yoleiquis vecina de calle D # 14 2363 entre 4ta y 5ta Reparto Reboredo, municipio de San Miguel del Padrón, nos informó que su padre había sido encontrado muerto a la 1 pm, detrás del mercado agropecuario que se encuentra cerca de su casa.
Ella nos llamó para que nos personáramos en el lugar, pues mantuvieron el cadáver en la acera de Reboredo y 4ta. hasta las 11 y media de la noche, cuando acudió el carro fúnebre con chapa número BO 3223362. Debido al tiempo que estuvo en el lugar, no pudieron llevarlo a Medicina Legal, porque su cuerpo había comenzado a descomponerse, ya que estaba tirado bajo el sol y después el sereno.
Fue trasladado directo a la Funeraria del Cotorro, y lo ubicaron en una capilla con aire acondicionado y 3 ventiladores para poderlo airear y que aguantara hasta las 8 de la mañana que fue enterrado.
Los hijos hacen responsable a los médicos del Hospital La Benéfica, los que decidieron dar el alta a su padre, sin ningún tratamiento, mandándolo a morir a la calle; lo que es sinónimo de haberle negado la atención médica. Lo mismo plantean del hecho de que tuviera que permanecer por espacio de 10 horas y media tirado en la acera, sin que fuera a recogerlo una ambulancia o un carro fúnebre.
Esta historia es la realidad de lo que pasa en la isla de Cuba y la vida tan difícil que tienen los cubanos que solo dependen del Estado.
La Habana, 31 de marzo de 2015.