Un cuadro del pintor ariguanabense Quidiello -casi de forma increíble- sobrevive en la pared de un bar de San Antonio de los Baños. En una de los muros interiores, por el pasillo de la parte de atrás que conduce a la cocina del bar restaurant Doña Yuya -en este municipio- se puede apreciar uno de los pocos cuadros salvados de este importante pintor de la Villa del Humor, el cual se dedicó a plasmar en su obra el paisaje ariguanabense, y todo aquello que era representativo del mismo.
Dentro de su obra se puede apreciar los parques y los puentes que pasan sobre el río, así como los sauces que melancólicos dejan caer sus suaves ramas hacia las aguas del Ariguanabo. Utilizaba la técnica de óleo sobre tela, y de estilo expresionista.
La pintura que se puede ver en la pared de este bar restaurant, representa una escena social en el parque que hoy se conoce como Parque del Humor, y recrea este lugar en otra época, cuando la imagen de este sitio nada tenía que ver con lo que es actualmente.
Esta pintura está ubicada allí desde hace varios años, cuando antes de ser Doña Yuya, era el bar La Cocinita, por lo que se calcula que esté en esta pared desde hace más de veinte años. El cuadro es ancho y alcanza casi toda la dimensión del muro. Se puede decir que sus colores se conservan aún muy bien debido a que la luz del sol no da directamente en este mural.
Rubén Suárez Quidiello, no sólo fue un genuino pintor del paisaje ariguanabenses sino que fue también un defensor de la cultura de esta localidad, y emprendió proyectos y espacios dedicados al rescate de la historia del mismo.
Era un protector de los sauces que se encontraban en las orillas del río, dedicándose de manera cuidados cuando alguno de ellos se caía, a plantar otro para que de ese modo existieran siempre, sin peligro a que con el tiempo llegaran a desaparecer estos preciosos árboles.
Aunque el cuadro hasta el momento se conserva, necesita de ciertos trabajos de mantenimiento para que esta obra Quidiello pueda durar mucho más tiempo y ser admirada y conocida por las generaciones venideras de ariguanabenses que no tendrán la oportunidad de conocer personalmente a este importante artista de la plástica.
Artemisa, 22 de diciembre de 2015.