En el Municipio Güira de Melena, Provincia Artemisa, cuando distribuyen la mortadella, por la cartilla de racionamiento, en unas cuantas carnicerías, no existen condiciones apropiadas para recibir el producto, no hay refrigeración.
Hay algunas personas sin posibilidades de comprar este cárnico el mismo día, debido a que trabajan u otros inconvenientes, pero se tropiezan con el hecho de que al segundo o al tercer día, ya se encuentra en mal estado; si usted se la echa a los perros tampoco pueden comérsela por el mal olor.
Pero además, tiene la posibilidad de que pueda contraer una intoxicación. Si el Ministerio de Comercio Interior conoce que tiene estas características en sus lugares de venta ¿por qué no ha tomado medidas en esas instalaciones?
Los que solo viven de lo que les “toca” por la mal llamada libreta de abastecimientos, no pueden aprovechar este producto que distribuyen una vez al mes.
Artemisa, 3 de octubre de 2013.