La leche es fundamental para el crecimiento y desarrollo infantil y en Cuba el régimen tomó la decisión que el mismo día que el niño cumple los 7 años de edad, se le retira la posibilidad de adquirir este alimento por la cartilla de racionamiento, mal llamada libreta de abastecimientos.
Entonces cuando llegan a esa edad, en que necesitan el calcio de la leche, se la cambian por café, como si fueran adultos.
Habría que preguntarse si para los médicos, en este país en que la medicina es un logro, los niños con esta corta edad dejan de ser niños, a pesar de que son la esperanza del mundo.
El yogur de soya, al que tienen acceso racionadamente, las pocas veces que lo sitúan en las bodegas para que se pueda adquirir, la mayoría de los niños no se lo quieren tomar, muchas personas en el campo lo utilizan para dárselo a los puercos. Pero en la zona no urbana, todavía se resuelven algunas cosas, con chivos e incluso campesinos que tienen vacas, sin embargo en los municipios cabeceras y en la capital del país, no hay escape como dice el cubano de a pie.
Artemisa, 16 de octubre de 2013.